A la hora de buscar
y leer documentos, la principal fuente de información serán las
fuentes primarias (como los artículos científicos en revistas),
pero la principal herramienta de la que se va a valer el investigador
para buscar la información requerida van a ser la fuentes
secundarias. Atendiendo a Osorio, son aquellas que contienen material
ya publicado, pero organizado según un esquema determinado,
resultado del análisis de las fuentes primarias y extracción de su
información. De esta forma, las fuentes secundarias van a servir
como servicios de alerta para facilitar que el científico conozca
las últimas publicaciones de interés, así como repertorios para la
recuperación de información.
Entre las
publicaciones secundarias se encuentran, por ejemplo, las revistas de
resúmenes, que van a incluir las referencias bibliográficas y los
resúmenes de los documentos. Por otro lado, están los índices
bibliográficos, permutados y de contenido, que van a tener
únicamente la referencia bibliográfica. También están los índices
de citas, en los que, si se conoce un determinado trabajo, se pueden
encontrar otros trabajos que lo hayan citado. Por último, los
trabajos de revisión van a ser fuentes importantes para conocer los
antecedentes de la investigación realizada en determinado campo, lo
que puede resultar interesante para familiarizarte con el mismo o
conseguir nuevas ideas o referencias.
Sin embargo, la
fuente secundaria más importante hoy en día y a la cual se va a
recurrir de forma usual va a ser la base de datos. En este aspecto,
las lecturas pueden parecer algo desactualizadas, puesto que si bien
suelen mencionar las bases de datos, no parece que se les de la
importancia que tienen hoy en día. Un ejemplo claro está en Osorio,
cuyo libro fue publicado en 1988 y si bien establece que las bases de
datos son la fuente secundaria de información por excelencia, sólo
puede describirlas como eran hace unas décadas, únicamente pudiendo
señalar la aparición reciente de bases de datos de texto completo.
Éste es sin lugar a dudas el método principal de búsqueda de
información en la actualidad, facilitando la búsqueda por palabras
clave, por autor, por tema, incluyendo las citas como los resúmenes
de citas, etc. Es decir, englobando todas las fuentes secundarias
mencionadas anteriormente, lo que resulta en una herramienta muy
potente.
Por último, cabe
simplemente señalar que la búsqueda y lectura de documentación en
esta entrada se ha tratado únicamente desde el punto de vista del
científico. Si nos situamos fuera de ese ámbito la búsqueda de
información científica va a cambiar radicalmente, estando dominada
por los distintos medios de divulgación que van a permitir saciar el
interés del público interesado.
Muy buen trabajo. Has entendido bien la documentación que se aportaba.
ResponderEliminarEs verdad que hay textos antiguos, aunque lo fundamental sigue siendo cierto. Siguen existiendo las bases de datos, SCOPUS y el WOS, que son utilizadísimos, lo son. Pero es verdad que hoy día se confunden con los buscadores (como google scholar), pero no es lo mismo.